Al igual que los antiguos alquimistas, esta pequeña colección está desarrollada como un proceso mágico, donde los elementos que participan se fusionan para así poder ser transformados. 

Aire, Tierra, Agua, Fuego se reúnen con el espíritu creador para una obra final. Piezas en sedas, terciopelo y algodón, bordadas a mano y llenas de significado que adquieren un valor más allá de la tela, del color y de la textura. 

Crisol es enigmática, sensual y a la vez cercana íntima y profunda. 
Colores puros y neutros como el negro y el rojo se mezclan con el dorado que emula El Oro, el elemento tan buscado por los alquimistas.

Cada prenda se vuelve un amuleto sagrado.

Son nuestras piezas atemporales que habitan en el presente. Esenciales que perduran con la emoción y el espíritu del inicio. Cada pieza auténtica revela aún más la belleza De quien elige la Troupe.

Hay un gran propósito en cada paso del proceso artesanal de creación, y atrás de cada símbolo bordado, convirtiéndose así cada prenda en un vehículo que transmite la esencia a quien lo usa.